Las técnicas de relajación son una forma de controlar el estrés y sus síntomas, recomendamos a todas aquellas personas que nos visitan que las practiquen.
Existen varias técnicas de relajación que contribuyen a reducir el estrés diario o el estrés puntual causado por una situación concreta. Te descubrimos todos los beneficios de poner en práctica las diferentes técnicas de relajación en este artículo.
¿Cuáles son los beneficios de las técnicas de relajación?
El principal objetivo de las técnicas de relajación es reducir los posibles efectos que puede causar el estrés en un individuo y, ponerlas en práctica, trae consigo diferentes beneficios, tanto a nivel físico como mental.
Destacamos entre todos ellos:
- Baja la intensidad y la frecuencia cardíaca.
- La presión arterial disminuye considerablemente.
- La frecuencia respiratoria se ralentiza.
- Mejoran las digestiones.
- Contribuyen a dormir mejor.
- Se reducen los niveles de ira y frustración.
- Aumentan la energía y se reduce la fatiga.
- Contribuyen a una mejor concentración y estado de ánimo.
- Se relajan los músculos y se mitigan los dolores crónicos.
- Disminuyen la actividad de las hormonas del estrés.
Las técnicas de relajación pueden ser llevadas a cabo en la comodidad de tu vivienda, siguiendo pequeñas directrices que, con la práctica, te aportarán mayores beneficios. ¿Quieres comenzar a utilizar las técnicas de relajación? En las sesiones podrás adquirir todas las habilidades necesarias.
Tipos de técnicas de relajación
Son varias las técnicas de relajación que se pueden poner en práctica, resaltamos estas:
Relajación autógena
Este tipo de relajación es aquella que proviene del interior de la persona. Consiste en la repetición de palabras o recomendaciones combinadas con imágenes que te ayuden a relajarte. Un ejemplo sería, imaginarte en un entorno tranquilo controlando la respiración o relajar el cuerpo por partes.
Relajación muscular progresiva
Esta técnica tiene su base en producir tensión en diferentes músculos, para luego relajarlos poco a poco.
Visualización
Consiste en la visualización de un entorno tranquilo y hacer un recorrido visual hacia un lugar en concreto o una situación que te traiga tranquilidad.
Además de estas técnicas de relajación, también podemos encontrar otras como la respiración profunda, masajes, meditación, aromaterapia, hidroterapia…
Durante las sesiones de psicología se pueden dar las pautas adecuadas y encontrar el método de relajación adecuado para ti. Además, cuanto más pongas en práctica las técnicas de relajación, más beneficios conseguirás y más control tendrás sobre los efectos que provoca el estrés en tu organismo.
Pon en práctica estas técnicas de relajación en tu vivienda o, si lo prefieres, visita el despacho de psicología de Carmen Fernández para conseguir más información y recomendaciones.